
Reciclaje de plásticos, residuos, reutilización de restos vegetales
Otro de los factores de gran importancia en el terreno de la protección del medio ambiente en cualquier sistema de producción son los residuos. De este modo, en el caso de los plásticos:
El 95% de los residuos plásticos de la agricultura de invernadero son llevados a una planta de tratamiento.
Por otro lado, la otra fuente de posibles residuos, los restos vegetales, también han encontrado (gracias a los esfuerzos e inversión en innovación) una utilidad como subproductos para la producción de energía renovable y que es reutilizada como compost vegetal en el invernadero.
Muchos agricultores ya utilizan lo que se denomina abonado en verde, reincorporando al suelo las plantas de los cultivos ya finalizados, libres de otros residuos inorgánicos, aportando materia orgánica a la tierra y recirculando dicho material para el siguiente cultivo.
El proceso es:
Producción → Manipulación → Control de calidad → Distribución
Las frutas y hortalizas de invernaderos solares del sur de Europa siguen un riguroso proceso de trazabilidad desde la producción hasta su llegada a los supermercados europeos.
En los centros de manipulación, se someten a controles de calidad antes de su distribución, garantizando así la seguridad alimentaria.
100% de trazabilidad en provincias exportadoras
Gracias a la tecnología y la digitalización, la trazabilidad se ha convertido en un pilar clave en la cadena alimentaria del sur de Europa.
Las empresas de frutas y hortalizas han implementado sistemas avanzados para controlar calidad, seguridad y logística, cumpliendo con normativas y certificaciones exigidas por las grandes cadenas.
Estos sistemas utilizan códigos de barras, QR y RFID para facilitar el seguimiento del producto.
(Información cofinanciada por la Unión Europea y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Las opiniones y puntos de vista expresados no reflejan necesariamente los de la Unión Europea.)